El papel del padre en una pérdida para mi es confuso... Por una parte muy duro, él pone cara a la familia y explica lo sucedido cuando tú no tienes ganas ni de respirar. Él también perdió a su hij@ pero todo el mundo pregunta por ti. Él tiene que aguantar sus lagrimas para secar las tuyas. Tiene que decirte una y otra vez que todo irá bien. Tiene que encargarse de todo para que tu cuerpo se recupere. Definitivamente si, es muy difícil cumplir esa función cuando tu también has sufrido la perdida.
Pero también es cierto que admiro la parte fácil, esa parte que cicatriza tan pronto al no haber sentido lo que sentimos las madres... Entiendo que un hombre no vive el embarazo como nosotras, no siente al bebé, no ve su cuerpo cambiar, aunque lo adoren y deseen tenerlo en los brazos, para ellos no es algo físico, y quizás por eso la herida cura tan pronto. Mi chico quería ser padre, adoraba a su bebé, lo sé... También sé que delante de todo estoy yo y que se preocupa cada día. Sé que nota que no soy la misma, sé que cada vez que me pregunta porque estoy seria la ve a ella en mis ojos y no dice nada.
"Dicen que los hombres hacen su duelo de manera diferente a la nuestra.
Nadie sabe por qué. Ni siquiera ellos mismos lo saben."
Créeme si te digo que me rompí de dolor cuando vi tus lagrimas desconsoladas día tras día, de verdad me alegro que no estuvieras allí cuando ella vino al mundo dormida y que hoy la recuerdes haciendo volteretas en una ecografía, me consuela que hayas pasado página y esos ojos que adoro ya no lloren, porque nada deseo más que tu felicidad.
También tengo que decirte que te envidio, cada día me gustaría tener tu capacidad para olvidar aquello o sencillamente para vivir tan tranquilamente con ello. Me encantaría hacer vida normal como tu y no volverme loca cada minuto por lo que nunca será. Sé que piensas en ello y sé que deseas ser padre pero me alegra que el dolor no nuble esa sonrisa que me enamoró de ti.
Todo esto es sincero pero también hay una parte oscura, una parte que dentro de mi se contradice... Y mentiría si no dijera que me faltaron y me faltan cosas. Me faltó verte aparecer con un regalo para tu bebé, me faltó verte mil veces más un beso en la tripa, me faltó verte colocando su cuarto...esto no es culpa tuya, no te dió tiempo. El problema no es ese, el problema es ahora, el problema es mi duelo y la ausencia de palabras del tuyo. Puedo soportar que el resto del mundo evite un tema que ahora es tabú, que omitan que mi pequeña existió, juro que con eso puedo, pero con que lo evites tú no puedo...Me niego a creer que solo yo me atormento con nuestra vida perdida. Y quizás tu también lo haces, solo que guardas silencio, como hago yo últimamente por que no veo respuesta. Me duele que no me recuerdes diariamente lo bonita que fue mi tripa, me duele profundamente que quitarás la imagen de mi bebé de la nevera, me duelen tantas cosas. Me faltan tantas otras. Falta una palabra por tu parte, una expresión que me recuerde cuanto deseas volver a vivir esos días,falta que me hables de ella sin pensar que me duele, es todo lo contrario, me llena de vida. Falta simplemente que me digas que la echas de menos, porque estoy segura de que lo haces. No son reproches, porque en el fondo lo entiendo, entiendo que no necesites hablar ni encender una vela cada mes por su recuerdo, conozco tu coraza para no sufrir de más y es la opción mas inteligente seguramente pero solo te pido que no la olvides. TÚ NO. No te olvides de que yo no te juzgo,tu duelo no es ni peor ni mejor que el mio,sencillamente son diferentes.
No quiero que olvides la meta que nos hemos marcado y esa vida planeada con tanta ilusión. Y por supuesto no olvides que agradezco con el alma cada beso y cada minuto que has dedicado a hacerme reir y a cuidarme después de esto, te quiero.